Aprender a conducir puede ser una experiencia estresante. En ocasiones, el acto de conducir puede incluso infundir miedo a los conductores experimentados. No importa el tiempo que lleves conduciendo, ver un gran semirremolque que avanza por la autopista a gran velocidad mientras intentas incorporarte al carril derecho es suficiente para que cualquiera agarre el volante con más fuerza.

Por fortuna, con el tiempo y la práctica suficientes cualquiera puede aprender a ser un conductor seguro y desarrollar más confianza en sus habilidades en la carretera. Aquí te daremos algunos consejos para sentirte más confiado conduciendo.

Sé paciente contigo mismo.

Dependiendo de cuánto practiques, puedes tardar unas semanas o incluso meses en ser un conductor seguro. No te presiones para convertirte en un conductor seguro de la noche a la mañana. En cambio, relájate, aprende a tu propio ritmo y, antes de que te des cuenta, estarás conduciendo con confianza y habilidad. Conducir no es una tarea fácil, por lo que te sugerimos adquirir un seguro que cubra una amplia gama de actividades. Estar asegurado aumentará tu confianza y el aprendizaje fluirá rápidamente.

Pase a carreteras sin tráfico.

Una vez que domine las habilidades básicas de conducción en un aparcamiento, el siguiente paso para convertirse en un conductor seguro de sí mismo consiste en pasar a la conducción en la calle. No saltes inmediatamente a carreteras con mucho tráfico en hora punta. En su lugar, busque calles con un mínimo de vehículos en la carretera (las primeras horas de la mañana en los fines de semana son un buen momento) y acostúmbrese gradualmente a tratar con otros conductores. A medida que vaya adquiriendo confianza, empiece a perfeccionar sus habilidades en calles y carreteras con más vehículos.

Practique con otro conductor.

Cuando aprenda a conducir por primera vez, lleve siempre en el coche a un conductor con experiencia. Puede aconsejarle sobre cómo manejar las situaciones que se le presenten y ayudarle a evitar errores. Pueden ayudarte a mantener la calma si una determinada situación te desconcierta. Y lo que es más importante, los conductores experimentados pueden ayudarte a ser un conductor más seguro reforzando cuando haces las cosas bien.

Tenga una ruta planificada.

Tenga siempre una ruta clara en mente. Si no sabes a dónde vas o cómo volver una vez que llegas, puede hacer que te distraigas o te pongas nervioso. Buscar los nombres de las calles escaneando la pantalla del GPS puede desconcentrarte del acto de conducir, lo que no es bueno para ningún conductor, ni para los nuevos ni para los experimentados.

 

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